domingo, 30 de mayo de 2010

Las bases de la Medicina Naturista


Un interrogante habitual en temas de alimentación suele ser: ¿es más saludable ser vegetariano que carnívoro?. Los efectos físicos que produce el consumo de carne y las evidencias que el gran Antropólogo Cuvier ha mostrado con respecto a la anatomía y fisiología comparadas parecen demostrar que sí.
Mi intención es exponer aquí dichas evidencias para mostrar las bases en que se apoya la Medicina Naturista para considerar a la alimentación vegetariana como la más adecuada para el hombre.
Según Cuviere: "Toda la estructura del cuerpo humano hasta en sus más insignificantes particularidades, corresponde a una alimentación vegetal.
Su observación demuestra que el ser humano carece de los característicos colmillos que poseen los animales carnívoros para desgarrar la carne, en cambio su dentadura, igual que en las criaturas herbívoras tiene el diseño adecuado para triturar y masticar alimentos vegetales.
En cuanto a la digestión, cuando la carne llega al estómago necesita una alta concentración de àcido clorhídrico en sus jugos gástricos para poder digerirse.
En el ser humano al igual que en los animales herbívoros dicha concentración es veinte veces menor que en los carnívoros.
Otra diferencia notable reside en el tracto intestinal, cuando se ingiere carne ésta entra inmediatamente en putrefacción y crea desechos altamente tóxicos dentro del cuerpo que se absorven en el intestino pasando al torrente sanguíneo, por lo tanto debe ser rápidamente eliminada, por ésto el tubo digestivo en los carnívoros es únicamente tres veces la longitud de sus cuerpos, en cambio los intestinos del hombre a igual que en los animales herbívoros es de doce veces esta longitud, lo que implica que la carne se retenga dentro de su organismo demasiado tiempo produciendo efectos indeseables generados por la absorción de toxinas.
Esta sobrecarga de toxinas hace que los riñones (órganos encargados de filtrar la sangre y extraer sus desechos), trabajen sobre forzados y requieran tres veces más trabajo que en personas que no comen carnes. En una persona joven estos órganos pueden soportar esta tensión, pero a medida que se envejece aumentan los riesgos de enfermedades a causa de ésto.
También, las dificultades que presenta el cuerpo humano para tratar con un exceso de grasa animal, es otro indicador de que éste no es un alimento adecuado para él.
Los animales carnívoros pueden metabolizar grandes cantidades de colesterol y otras grasas sin padecer efectos adversos, en cambio, cuando el hombre consume grasas saturadas en exceso sufre en sus arterias el depósito de placas, llevando a éstas a un estado de endurecimiento conocido como arterioesclerosis, produciéndose un estrechamiento en el flujo sanguíneo hacia el corazón con el consiguiente riesgo de ataque cardíaco, trombosis etc.
Numerosos estudios han demostrado también el vínculo existente entre el cáncer de colon y el consumo de carne, debido a que su lento tránsito a través de esa parte del intestino, permite que los desechos tóxicos provoquen sus efectos dañinos.
Existen además evidencias que vinculan a otros tipos de cáncer con la ingesta de carne.
Otra duda que surge es si la dieta vegetariana nos proporciona la cantidad de proteínas que nuestro cuerpo necesita, la respuesta es que los aminoácidos que forman las proteínas, aún los esenciales que nuestro cuerpo necesita adquirir a través de la alimentación porque él no puede sintetizarlos, se encuentran tanto en los alimentos vegetales como en los animales, por ejemplo: cereales integrales, legumbres, frutas secas y vegetales son perfectas fuentes de proteínas, sólo debemos combinarlos adecuadamente para no prescindir de ningún aminoácido esencial, de todas formas si la dieta incluye huevos y productos lácteos la fuente será completa.
Vale aclarar también que el consumo de carnes implica un aporte excesivo de proteínas, que al no poder ser utilizadas por el cuerpo se convierten en desechos nitrogenados que sobrecargan a los riñones.
Existen también razones éticas que han llevado y llevan a infinidad de personas a adoptar la dieta vegetariana, y ésto tiene que ver con que la violencia y crueldad ejercida contra los animales en su matanza, no es necesaria y sí es evitable.
Considerando todo lo antedicho es importante recalcar que adoptar esta forma de alimentación implica contar con el adecuado asesoramiento enfocado en obtener a través de la alimentación todos los nutrientes necesarios, para no caer en el riesgo de carecer de lo que nuestro cuerpo necesita para estar saludable.